La cenicienta que no quería comer perdices!

martes, 28 de junio de 2011

Un mensaje especial sobre la violencia

Este es un invalorable mensaje de Nelson Mandela
escrito para el prólogo del Informe Mundial
sobre la Violencia y la Salud (OMS-2003),
que considero un deber de todos difundir.

El siglo XX se recordará como un siglo marcado por la violencia. Nos abruma con su legado de destrucción masiva, de violencia infligida a una escala nunca vista y nunca antes posible en la historia de la Humanidad. Pero este legado, fruto de las nuevas tecnologías al servicio de ideologías de odio, no es el único que soportamos ni que debemos arrostrar.


Menos visible, pero aún más difundido, es el legado del sufrimiento individual y cotidiano: el dolor de los niños maltratados por las personas que deberíanprotegerlos, de las mujeres heridas o humilladas por parejas violentas, de los ancianos maltratados por sus cuidadores, de los jóvenes intimidados por otros jóvenes y de personas de todas las edades que actúan violentamente contra sí mismas. Este sufrimiento, del que podría dar muchos más ejemplos, es un legado que se reproduce a sí mismo a medida que las nuevas generaciones aprenden de la violencia de las anteriores, las víctimas aprenden de sus agresores y se permite que perduren las condiciones sociales que favorecen la violencia. Ningún país, ninguna ciudad, ninguna comunidad es inmune a la violencia, pero tampoco estamos inermes ante ella.

La violencia medra cuando no existe democracia, respeto por los derechos humanos ni condiciones de buen gobierno. Hablamos a menudo de cómo puede enraizarse una “cultura de la violencia”. Es muy cierto: como sudafricano que ha vivido en el apartheid y vive ahora el período posterior, lo he visto y lo heexperimentado. También es cierto que los comportamientos violentos están más difundidos y generalizados en las sociedades en las que las autoridades respaldan el uso de la violencia con sus propias acciones. En muchas sociedades, la violencia está tan generalizada que desbarata las esperanzas de desarrollo económico y social. No podemos permitir que esta situación se mantenga.

Muchas personas que conviven con la violencia casi a diario la asumen como consustancial a la condición humana, pero no es así. Es posible prevenirla, así como reorientar por completo las culturas en las que impera. En mi propio país, y en todo el mundo, tenemos magníficos ejemplos de cómo se ha contrarrestado la violencia. Los gobiernos, las comunidades y los individuos pueden cambiar la situación.A nuestros hijos, los ciudadanos más vulnerables de cualquier sociedad, les debemos una vida sin violencia ni temor. Para garantizarla hemos de ser incansables en nuestros esfuerzos por lograr la paz, la justicia y la prosperidad no solo para los países, sino también para las comunidades y los miembros de una misma familia. Debemos hacer frente a las raíces de la violencia. Solo entonces transformaremos el legado del siglo pasado de lastre oneroso en experiencia aleccionadora.

Nelson Mandela

jueves, 23 de junio de 2011

NO CABEN MÁS ESPERAS

No caben más esperas,
más treguas al destino;
hoy decido poner final a nuestra historia
y volver a empezar yo sola mi camino.

Devuélveme la luz que te llevaste,
la vida y la esperanza que he perdido,
y quédate tú entero y para siempre
el cielo que me habías prometido.

Devuélveme mi voz y mis anhelos,
la voluntad que tuve secuestrada,
las horas que te he dado de mis noches,
el sol que le has robado a mis mañanas.

No caben más esperas, más engaños;
que ya tengo la espera desgastada.
Hoy pongo un rumbo nuevo a mi odisea
y doy por terminada esta batalla.

Atrás queda el silencio y la carcoma,
el desmotivo lento de las tardes,
el ventanal abierto de un deseo
que un día terminó por marchitarse.

Mañana no habrá duda en mi cuaderno,
ni miedo ni nostalgia en mi mirada;
pues tú serás ya parte del pasado
que quedará enterrado entre la nada.

María Paz Cerrejón

jueves, 16 de junio de 2011

VIOLENCIA DE GÉNERO: consecuencias en los hijos


Los niños no son víctimas sólo porque sean testigos de la violencia entre sus padres, sino porque "viven en la violencia". Son víctimas de la violencia psicológica, a veces también física, y crecen creyendo que la violencia es una pauta de relación normal entre adultos.
(Save the Children)


Los hijos de las mujeres maltratadas son receptores directos de la violencia contra sus madres, aunque ellos directamente, no hayan recibido ni un solo golpe.

 Presenciar la angustia de la madre maltratada, su temor, tristeza, les produce gran inseguridad y confusión. Esa angustia se traduce en numerosos trastornos físicos, terrores nocturnos, incontinencia, alteraciones del sueño, problemas alimentarios, ansiedad, estrés, depresión entre otros problemas.

Las agresiones del padre, sobre el agente de socialización por excelencia, la madre, hace que los hijos crezcan sumergidos en el miedo, siendo candidatos a sufrir depresiones o trastornos de personalidad. Todo ello sin un solo golpe, sin un maltrato directo.

Algunos autores ha llegado a la conclusión de que los niños expuestos a violencia contra su madre, desarrollarán valores asociados a la violencia de género, como por ejemplo:

1) Si un hombre pega a una mujer es porque ella lo merece. Seguramente algo habrá hecho.
2) Las mujeres no tienen los mismos derechos que el hombre, son inferiores.
3) En la familia el hombre manda, los demás obedecen.
4) Pegar a las mujeres es normal y no tiene consecuencias.
5) Si quieres que te respeten debes ser violento.

Los hijos de la violencia de género viven de forma continua y prolongada situaciones agresivas y abuso de poder, estas experiencias marcarán su comportamiento y valores cuando sean mayores. Aprenden a entender el mundo y las relaciones de forma inadecuada. La familia es el primer agente socializador y el más determinante para el desarrollo y formación de modelos y roles. Son las víctimas invisibles de la Violencia de Género.

jueves, 9 de junio de 2011

La prostitución ¿forma de violencia contra las mujeres o trabajo?

La cuestión acerca de si la prostitución es una forma de violencia hacia las mujeres o un trabajo aún no ha sido saldada y tal vez no pueda serlo. Como en otros tantos temas, en momentos de aceptación cada vez mayor de las diversidades, no hay un discurso único que pueda considerarse revelador de 'la verdad'. Todavía la discusión sigue vigente.

Las actoras:'las mujeres en prostitución' y las 'trabajadoras sexuales' se identifican a sí mismas desde lugares distintos. Desde diversos sectores del feminismo, el movimiento de mujeres, la Academia, los Organismos Internacionales, las mujeres políticas, se sostienen ambas posiciones de manera irreconciliable. ¿Cómo es que las mismas personas, las mismas organizaciones que defienden el derecho a la diversidad, a la definición de la propia identidad pretenden imponer el discurso único en este tema?
La Argentina adoptó el sistema abolicionista que pretende poner fin a la prostitución. En 1949 la corriente abolicionista se plasma jurídicamente en la Convención contra la Trata de Personas y la Explotación de la Prostitución Ajena.
Sostiene que debe penalizarse a proxenetas, rufianes, y a quienes lucran con la prostitución ajena, pero no a quienes la ejercen. Prohíbe la existencia de prostíbulos.
Pero en la práctica no se cumple. Los prostíbulos y sus variantes: whiskerías, cabarets, casas de masajes, son una realidad amparada por la connivencia policial, judicial y política.
Desde la Coalición Against Trafficking Women (CATW) se plantea que no debe hacerse diferencia entre prostitución y trata, como si toda mujer en prostitución estuviera de alguna manera secuestrada.
Algunas abolicionistas toman el ejemplo de Suecia que desde 1999 penaliza al cliente de prostitución o prostituyente con multas y hasta cárcel, como un sistema para implementar en nuestro país.AMMAR Capital sostiene la postura abolicionista. Consideran que la prostitución es una forma de violencia contra las mujeres.Por otro lado la corriente reglamentarista legaliza a los proxenetas, la instalación de prostíbulos, somete a quienes la ejercen a controles sanitarios y administrativos y legitima a los clientes-prostituyentes. Hace una clara distinción entre prostitución y trata. Está en vigencia en Holanda y en Alemania.
En nuestro país la Asociación de Mujeres Meretrices Argentinas AMMAR, sindicato de trabajadoras sexuales, sostiene que la prostitución es un trabajo elegido libremente, aunque no lo fomenten, pero
sí lo consideran una salida a situaciones de pobreza.
Adhiero a los planteos abolicionistas. Considero la prostitución como una violación a los derechos humanos de las mujeres porque es violencia, subordinación y opresión. Implica la mercantilización del cuerpo y de la subjetividad de las mujeres en la sociedad capitalista y patriarcal en que vivimos.

Sin embargo, en esta modernidad líquida en la que estamos viviendo no sólo el cuerpo de las mujeres está mercantilizado.

Zygmunt Bauman nos habla de los blogs en Internet:'de la descarada sinceridad y franqueza con la que se exhibían en público las experiencias más privadas y las aventuras más íntimas, sinceridad que, traducida en términos contundentes, podríamos hablar de intenso fervor y de evidente desinhibición a la hora de ponerse uno mismo (o, cuanto menos, ciertas partes o aspectos de la propia persona) a la venta en el mercado'*

En esta sociedad de consumidores se ha confundido la libertad personal con la adquisición de las ofertas del mercado. Y esto afecta a todas y todos. Aunque seguramente afecte menos a aquellxs que han quedado fuera del mercado lxs excluidos, aquellxs a lxs que sólo les queda la prostitución para sobrevivir.
Pero entonces ¿sólo la subjetividad de las mujeres pobres está mercantilizada?
Las mujeres que teorizamos, asistimos a Congresos, legislamos, damos clases en las Universidades, no estamos en situación de prostitución.
Pienso que más allá de la posición a la que adhiramos, debemos crear las condiciones para que todas las protagonistas puedan hablar.
No somos las que 'sabemos' por ellas. La idea de ser agentes de la 'conciencia 'y del discurso nos ponen en el lugar del poder. Debemos luchar contra las formas de poder que se manifiestan en el orden del 'saber', de la 'verdad', de la 'conciencia'.

Las personas concernidas deben poder hablar por su cuenta. Las que acuerden con nosotras y las que no.

Por estar convencidas de que la prostitución es una forma de violencia contra las mujeres no podemos violentar a las que piensan distinto imponiéndoles un discurso único que no admita la diversidad..
Se deben implementar políticas públicas, sobre todo políticas de empleo genuino, de vivienda, para aquellas mujeres que quieran dejar la prostitución.
Y con respecto a los clientes –prostituyentes, no comparto la creación de nuevas figuras penales, el poder punitivo para resolver problemáticas sociales y culturales, más gente en las cárceles.

Sí podrían encararse campañas dirigidas tanto a los adolescentes como a los adultos, incluir el tema dentro de la Educación Sexual en las escuelas, desalentando el consumo de prostitución con los argumentos de que se puede estar violentando a una mujer en situación de trata o de explotación sexual que no puede elegir y que por otra parte las relaciones sexuales no mercantiles, deseadas por ambos, donde intervengan la ternura, el compañerismo y otros sentimientos pueden ser mucho más placenteras; que el consumo de prostitución es una forma devaluada y degradada del ejercicio de la sexualidad.

Fuente: Artemisa Noticias/ Por Ana Lía Glas

lunes, 6 de junio de 2011

                              LAS PERSONAS MANIPULADORAS
Uno de los signos más comunes para detectar abusadores emocionales, es ver cómo manejan el tema del respeto. Las personas abusivas son muy demandantes y confunden respeto con atropello, arrogancia y falta de educación.
El abusador típico, suele exigir respeto. Demanda ser respetado, no sólo porque todo ser humano merece respeto, sino porque los abusadores suelen tener delirios de grandeza y atribuirse más derechos que los demás. Muchos abusadores emocionales creen, sinceramente, que deben ser respetados más sólo porque ellos sienten que valen más que otras personas. Esto es especialmente notorio cuando un abusador emocional ocupa algún cargo jerárquico en una empresa o un cargo de poder (político, religioso, social, académico). El abusador emocional realmente cree que merece un trato mejor o superior y un respeto mayor que aquél que merecen otras personas. Generalmente, suelen ser arrogantes, usan maniobras de manipulación o intimidatorias, exigen respeto y se ofenden fácil y rápidamente cuando no son tratados como desean.
La manera más fácil de idientificarlos es por su doble discurso o discurso inconsistente. Suelen exigir respeto al mismo tiempo que les faltan el respeto a los demás. Esto se debe a que creen que son mejores o más importantes que otras personas y que cualquier otro ser humano que no esté a su mismo nivel, está “por debajo” de su rang o cargo, y por consiguiente no merece el mismo respeto que ellos.
Por ejemplo, en un ámbito laboral o académico, es natural respetar a los jefes o profesores. Pero estos no siempre respetan a los empleados o alumnos de igual manera. En la vida diaria, nos cruzamos con muchas personas que ocupan cargos jerárquicos o que tienen un cierto rango y que, socialmente, debemos respetar. Un agente de cumplimiento de la ley (policía), un juez, un árbitro deportivo. Son quienes tienen cierto poder para hacer cumplir leyes o imponer un orden.
Pero lo cierto es que su jerarquía no les confiere, también, el poder de irrespetar a los demás. Cuando una persona es digna, bien educada y respetuosa, no necesita faltarle el respeto a otras personas al mismo tiempo que exige respeto de ellas para sentir que vale más. Y el abusador emocional presenta estas características. Por lo general exigirá respeto, pero no mostrará el menor signo de respeto hacia los demás, y mucho menos, de buena educación. Se ofenderá por nada. Demandará disculpas, pero nunca se tomará el trabajo de responder de un modo educado, mostrando respeto hacia otros individuos: por ejemplo, cuando el abusador emocional malinterprete algo, primero se ofenderá rápidamente exigiendo una disculpa, y luego nunca dirá gracias cuando la otra persona se disculpe, porque el abusador emocional realmente cree que está por encima de los demás y que los demás no merecen respeto como él.
Si queremos ser respetados, debemos respetar primero. Si alguien nos falta el respeto y se disculpa, debemos mostrar educación y respeto por esa persona, agradeciéndole que se haya retractado. El hecho que una persona ocupe un cargo o rango más alto que otra, no le da derecho a faltarle el respeto a otros o a creer que merece más respeto que los demás.
Los abusadores emocionales suelen poner mucho énfasis en las ofensas personales y cualquier comentario lo tergiversan y lo convierten en motivo de ofensa rápido. Cuando un abusador le exija respeto, aunque usted no lo haya ofendido, discúlpese y aléjese de esa persona tanto como pueda. Los abusadores emocionales normalmente no aceptan que los demás tengan razón. Las personas emocionalmente sanas y, sobre todo, bien educadas, sí.

domingo, 5 de junio de 2011

MUJERES QUE HICIERON LA HISTORIA: JUANA AZURDUY
Siglo XVIII - Juana Azurduy nació en 1780 en la Provincia de Chayanta, departamento de Potosí. Guerrillera y heroína del Alto Perú (hoy Bolivia), de las luchas por la emancipación latinoamericana.De ascendencia mestiza, quedó huérfana muy niña y pasó varios años en el convento de Santa Teresa de Chuquisaca. Hablaba el castellano, quechua y aymara. En 1805 se casó con Manuel Padilla y en 1809 los dos se unieron a la Revolución de Chuquisaca, y al mando de Manuel Belgrano, enviado de Buenos Aires, combatieron a las realistas(defendían la monarquía española) y defendieron las zonas de Chuquisaca y las selvas de Santa Cruz de la Sierra.
Tras la derrota del Ejército del Norte, los realistas confiscaron las propiedades de los Padilla y Juana fue apresada. Su esposo logró rescatarla; se incorporaron al ejército libertador de Manuel Belgrano, y volvieron a las acciones guerrilleras, reclutando y organizando a los milicianos: indígenas, mestizos, criollos. Armados con hondas, lanzas, boleadoras, con coraje y fiereza luchaban por la libertad, por la justicia y contra la opresión del ejército español.
Juana comenzó a destacarse como valerosa luchadora, y en 1816 fue ella quien lideró la guerrilla que atacó el cerro de Potosí: con audacia y valentía, arrebató la bandera al jefe de las fuerzas enemigas y dirigió la ocupación. Por esta acción el gobierno de Buenos Aires le otorgó el rango de teniente coronel de las milicias. El general Belgrano le hizo entrega simbólica de su sable.
Tras el asesinato de Padilla en noviembre de 1816, Juana intentó reorganizar la tropa, pero acosada por el enemigo, perdió la colaboración de Buenos Aires; viajó a Salta, para seguir combatiendo junto a las tropas de Güemes. A la muerte de éste en 1821, pasó varios años en Salta, solicitando sus bienes confiscados para poder regresar a su ciudad natal. En 1825 ya Bolivia independiente, el mariscal Sucre, nombrado presidente vitalicio le otorgó una pensión que le fue retirada en 1857 bajo el gobierno de Linares.
El Libertador Bólivar la visitó en Sucre, para reconocerle sus sacrificios por la libertad y le otorgó el grado de Coronel. Juana Azurduy, aguerrida luchadora, intrépida y tenaz, símbolo de la independencia latinoamericana, murió indigente y olvidada en Sucre en 1862, a los 82 años y enterrada en una fosa común.

Cien años después de su muerte, sus restos fueron exhumados y guardados en un mausoleo que se construyó en su homenaje en la ciudad de Sucre.

En eL mes de noviembre de 2009 Cristina Fernandez de Kirchner y Evo Morales Ayma, presidentes de Argentina y de Bolivia respectivamente, ascendieron en forma póstuma, a la luchadora de la independencia en la zona del Alto Perú, Juana Azurduy, al grado de Generala del Ejército.

miércoles, 1 de junio de 2011

NÚMEROS TELEFONICOS DE AYUDA A VICTIMAS DE VIOLENCIA
El Senado bonaerense analiza una iniciativa para que todo el transporte público bonaerense destine un espacio para difundir los lugares de atención en caso de violencia familiar.

El proyecto de ley presentado por el senador Santiago Nino, prevé incorporar al transporte público un espacio de difusión de los números de teléfono, lugares de atención, Comisarías de la Mujer, fiscalías y ONG`s dedicadas a luchar contra la violencia doméstica.

El legislador explicó a Télam que cada vez se ven más casos de mujeres golpeadas, pero nuestra obligación es ir más allá de los casos mediáticos, y dejar de ignorar esta problemática que suele conocerse cuando la víctima ya fue asesinada.

La provincia posee recursos para la atención del tema, además muchas organizaciones que abordan esta problemática.

Necesitamos difundir esos recursos para que estén al alcance de todos, indicó.